@milcientoques | A la hora de intentar un pequeño análisis sobre qué se va a encontrar España este miércoles en Maracaná, todo podría reducirse a una reflexión lógica y que no haría más que inundar de pesimismo a todos los aficionados a la selección española: si esta Chile es mejor que la que nos encontramos en 2010, y nosotros llegamos tocados y en baja forma, contando con que en aquel momento nos hicieron pasar un mal rato, ¿cuáles son las posibilidades reales de que la selección española llegue a la última jornada con posibilidades?

No nos vamos a centrar en eso, pues ahora, creo, lo más importante es definir a esta selección para que, cuando nos sentemos mañana frente al televisor, no nos veamos sorprendidos por el conjunto dirigido por Jorge Sampaoli.

Chile es una selección sin complejos, que busca el ataque sea cual sea el rival. Están confeccionados para morder y dudo que España se libre de sus constantes arremetidas. La máxima de este conjunto es hacer daño en el área rival, y tanto, anteriormente Bielsa, como ahora Sampaoli, lo intentan con todas sus armas. 

Sobre el césped, forman con dos delanteros y un 'falso delantero' que se mueve tras ellos. Este es Valdivia, el mediapunta del Palmeiras atesora una clase bárbara, y, junto a Eduardo Vargas y Alexis Sánchez forman un ataque de ensueño. Vargas y Alexis suelen caer a banda, y desde allí, y sobre todo Alexis, trazan peligrosas diagonales hacia el centro, donde combinan con Valdivia o Díaz para acabar penetrando en el área rival.

Alexis, con Chile, es otro. Es el amo y señor y desempeña su papel de estrella con soltura. Es libre para moverse por el campo y bajar a recibir, llevando a cabo conducciones peligrosas que rompen líneas de presión con un simple movimiento de cadera. 

Chile carece de centros laterales, pues pocos jugadores de su plantilla superan el metro ochenta de altura. Por esta razón, y llegados a línea de fondo, buscan atacar el primer palo por medio de Alexis o Vargas o, de lo contrario, el rechace que pueda cazar Valdivia o cualquier otro medio que llegue desde atrás. 

La defensa es su punto débil. Está claro que, de su bloque, es la línea en la que disponen de menos jugadores de 'élite'. Gary Medel es un jugador agresivo y que puede destacar por su rapidez, pero su precipitación puede jugarle a  veces una mala pasada. González es su defensa más jerárquico, pero se apunta a que no llega en plenas condiciones a la cita mundialista. 

Los laterales, siempre largos, es un peligro más a tener en cuenta. Jara e Isla son incansables y pueden llevar a cabo peligrosas combinaciones con los jugadores de ataque. Además, se sospecha que Sampaoli pueda utilizar el 5-3-2 que tan buenos resultados dio a Holanda ante los españoles, lo que liberaría más si cabe a los laterales en ataque, además de sumar gente en mediocampo que se atrevieran a discutirle la pelota a la selección española. 

En el centro del campo tenemos varios jugadores de características harto interesantes. Marcelo Díaz ha llegado a ser comparado con Xavi Hernández, y su toque, tanto en largo como en corto, y circulación rápida de balón, puede ser peligrosa para la defensa española. Tanto él como Arturo Vidal son los dos máximos exponentes del espíritu chileno en la parte ancha del terreno de juego. No sabemos si Vidal llegará en plenas condiciones, lo que sí que sabemos es que, con semejantes cualidades, no le haría falta estar al cien por cien para causar un estrago al equipo español.