El Real Murcia goleó sin piedad al Mirandés (5-0) y presenta candidatura a todo en el tramo final de Liga en Segunda División. Julio Velázquez volvió a repetir el ‘once’ del Rico Pérez. Y volvió a acertar. El técnico salmantino parece que tiene una varita mágica que todo lo que toca se convierte en éxito. 

El Murcia saltó al terreno de juego dispuesto a ponerse en ventaja lo antes posible y pronto derribó la barrera de Bernardo. En el minuto cuatro, Wellington Silva hizo una brillante jugada entre líneas y el balón quedó muerto para que, Kike, de disparo centrado, abriera la lata. 

Con el 1-0, los grana jugaron en su salsa. A dominar la situación, el balón y a esperar su momento. Es como una filosofía que lleva este equipo grabada a fuego. Por momentos, se siente tan superior al rival que se contenta con controlar el balón y tenerlo lo más alejado posible del área de Casto. El cloroformo se acabó con un balón largo que controló Kike, y que, con excepcional sutileza, colocó en vaselina por encima de Bernardo. Un tanto soberbio digno de un jugador de categoría superior. Y apenas, un minuto después, Eddy, de certero cabezazo, ponía el 3-0 con él que se cerraba la primera mitad. Una renta que suponía un peso demasiado difícil de levantar para el conjunto de Carlos Terrazas. 

Tras el descanso, el Real Murcia siguió a lo suyo. Pronto encontraría puerta de nuevo. Una excelente internada por banda izquierda de Saúl que Kike sólo necesitó empujar a la red. Gracias al hattrick conseguido hoy, el de Motilla de Palancar, llega a la cifra de 21 dianas, marca que no ha logrado ningún jugador grana en las últimas dos décadas. Con el cuarto gol, Velázquez prefirió dar descanso al escurridizo Wellington Silva, que estaba siendo blanco de duras entradas por parte de los defensores del Mirandés, que no sabían cómo frenar sus entradas por banda. 

La tarde goleadora la redondearía Dominique Malonga de un certero cabezazo tras centro de Saúl Berjón. Y a partir de ahí, fue cuando la escuadra pimentonera, decidió bajar el pistón e ir dosificando esfuerzos pensando en partidos venideros. El público, mediante olas y cánticos, también formó parte del espectáculo. 

Con los tres puntos conseguidos, el Murcia se coloca en cuarta posición en la tabla, afianza puesto de playoff con cuatro puntos de margen sobre el octavo clasificado y se sitúa a tan sólo cinco del Eíbar, que en segunda posición, se encuentra en posición de ascenso directo.

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